Álex Aguinaga no lo niega. Además de haber sido un ídolo del Deportivo Quito, fue su hincha acérrimo y aún guarda sentimientos de admiración y respeto hacia su exclub, al que hoy volverá a enfrentar (ya lo hizo en el 2004 cuando jugó en Liga de Quito), pero esta vez lo hará como entrenador de Barcelona, en la capital, desde las 11:30.
El Güero no evita reconocer que le da “mucha alegría” reencontrarse hoy con su ‘viejo amor’ futbolero, al que defendió durante cinco temporadas, desde su debut en primera división, en 1984, hasta que se marchó al Necaxa, en 1989.
Tras culminar su carrera de 21 campañas como futbolista e iniciar una nueva como técnico, Aguinaga (42 años) reafirma su afecto hacia una institución por la que siente un cariño de “toda la vida, porque allí empecé. Fui hincha número uno del D. Quito cuando yo era chiquito. Jugué en las categorías inferiores y luego en el equipo mayor”.
No obstante, revela que los detalles de su estreno en el balompié nacional, con el cuadro de la Plaza del Teatro, diez días después de cumplir 16 años, con el tiempo se han escapado de su memoria. “Del debut en sí no me acuerdo. Solo que esa semana sabía que iba a jugar y entrené todos los días”.
La única imagen que permanece intacta en la mente del Güero es “cuando entré a la cancha. Fue un momento muy bonito. Pero de allí no me acuerdo nada más, la verdad”. Aguinaga intentaba acordarse del 19 de julio de 1984, cuando se estrenó frente al Técnico Universitario, en el estadio Atahualpa. Entró en reemplazo de Alberto Colorado Andrade y al final celebró un triunfo azulgrana de 2-1.
Lo que el actual DT de Barcelona nunca olvida es quién fue el entrenador que lo hizo debutar. No hace ningún esfuerzo para recordar y responde: “Fue Carlos Sevilla”, de quien dice “ahora sé que agarró al Independiente José Terán”.
El estratega canario no olvida que fue Sevilla, entre otras cosas, porque ambos son ibarreños y porque lo invitó al plantel capitalino, donde le dio la posibilidad de ser titular.
De la afición chulla también tiene gratas remembranzas. Pero hoy está listo para tenerla en contra. “Sé que la hinchada va a estar con su equipo y sé que habrá gritos en contra, pero tengo que dedicarme a lo mío, que es dirigir a Barcelona. Igual son experiencias que ya las viví cuando jugué en Liga (Q)”.
Por hoy Aguinaga, caracterizado por su serenidad, prefiere archivar sus antecedentes chullas y reemplazar su antiguo fanatismo por un aprecio distante. “Me da mucho gusto que en los últimos años el Quito se haya mantenido arriba, es un placer verlo allí. Pero ahora nosotros también queremos llegar a instancias importantes, en nosotros está hacerlo, por eso vamos a tratar de ganar”.
6-1
CAÍDA CHULLA EN 1985
El actual DT canario tuvo como chulla la posibilidad de disputar el título hace 26 años. Con Carlos Sevilla en el banquillo técnico y Álex Aguinaga en la cancha, Barcelona ganó la corona al golear en el Modelo.
Fuente: El Universo
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